A fines del año 2019, Liga de Defensa Comercial formalizó la creación de su Centro de Mediación y Arbitraje (CMyA LIDECO), el cual puede resultar una opción que abre perspectivas interesantes en los actuales tiempos de crisis.
En primer lugar, cabe señalar que las opciones de mediación y arbitraje se erigen en una forma adecuada de solución de controversias entre empresas de diferentes tamaños en contextos de normalidad, pero aún más en contextos como los actuales, donde la justicia está en feria judicial sanitaria y no sabemos exactamente hasta cuando durará.
Como alternativa a este complejo contexto, el Centro de Mediación y Arbitraje de LIDECO pone a disposición soluciones tecnológicas como llamadas o reuniones virtuales que pueden implementarse con la mediación especializada de dicho Centro, a efectos de buscar acuerdos que redunden en beneficios para todas las partes.
El arbitraje es un mecanismo muy útil para resolución conflictos entre empresarios en el que, si las partes se ponen de acuerdo en someterse al arbitraje, el mismo puede darle una solución en términos razonables y con la misma fuerza vinculante que una sentencia.
Asimismo, la mediación resulta sumamente adecuada para todo tipo de controversias, evitando costos a las empresas y aportando soluciones a todos los rubros, destacando especialmente que estas fórmulas pueden ser idóneas para resolver las controversias generadas en torno al comercio electrónico e industria del software.
En segundo lugar, este proceso aporta soluciones en plazos muy acotados, que pueden implicar a lo sumo dos o tres audiencias virtuales en las que se busca la autocomposición del conflicto, para lo cual se siguen técnicas y procedimientos ya probados.
En tercer lugar, cabe mencionar que entre las ventajas de esta prestación se encuentra la particularidad de que las partes tienen claro desde el inicio los costos que demanda el uso del servicio de un Centro de Mediación y, por tanto, podrán abordar el proceso sin sobresaltos.
En cuarto lugar, se menciona la absoluta confidencialidad y profesionalidad de los conflictos que se planteen así como de las soluciones a las que se arribe.
Entendemos que este es un aporte social/empresarial muy positivo porque ayuda de un modo profesional e institucionalizado a solucionar conflictos que de otro modo es muy difícil remediar.
En adición, debe tenerse en cuenta la flexibilidad que involucra este servicio, pues las audiencias de mediación o arbitraje se pueden programar en función de las necesidades y la disponibilidad de los involucrados.
Estas soluciones son aplicables no solo a conflictos puntuales entre acreedor y deudor, sino que también resultan eficientes como soluciones preconcursales, donde se puede gestionar un acuerdo que evite un concurso cuyo resultado seguramente sería ruinoso para todos los interesados. Estas fórmulas de mediación han resultado ser especialmente idóneas para la solución de conflictos entre un deudor y sus acreedores porque permite sentar a la misma mesa a quienes tienen el poder de decisión y, con ayuda especializada, buscar la solución técnica y profesional más adecuada a la situación. En efecto, no es ni con presiones desmedidas ni ocultando información o activos que pueden lograrse las mejores soluciones, sino con un planteo serio y honesto, con información que se verifique técnicamente por terceros independientes y ajenos a las partes, como los mediadores del CMyA LIDECO.
En el marco de la nueva realidad empresarial – económica, entendemos que el CMyA de LIDECO ofrece una solución de calidad para salvaguardar el valor de las empresas en particular y a nivel general para proteger la economía del país, evitando la destrucción de valor.
Quedamos a las órdenes para ampliar esta información por medio del mail Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.