En noviembre pasado, el Dr. Fernando Cabrera y el Dr. Daniel Martínez Vigil, asistieron en representación de LIDECO al XIV Congreso Iberoamericano de Derecho Concursal, celebrado en la ciudad de Málaga, España.
El Comité organizador del Congreso, encabezado por el Prof. español Aurelio Gurrea Chalé, definió como título del mismo “Una visión comparada de la insolvencia”. El Instituto Iberoamericano cuenta como principal riqueza el estar integrado por colegas que año a año ilustran a la comunidad sobre las distintas innovaciones y problemáticas de cada uno de los respectivos ordenamientos, lo que se traduce en una experiencia sumamente fermental y enriquecedora.
Además de la participación habitual de apreciados colegas argentinos, chilenos, colombianos, mexicanos, puertorriqueños, italianos -y por supuesto, la gran delegación de locatarios- fueron invitados a realizar una serie de disertaciones miembros del Banco Mundial, de la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil (UNCITRAL) y de la International Association of Restructuring, Insolvency & Bankruptcy (INSOL).
En particular, en Europa está en boga la “preconcursalidad” entendida como aquellos mecanismos que pueden ser creados para enfrentar los prolegómenos de las crisis empresariales.
Esto quiere decir que el instituto del concurso ha dejado de ser la única opción para intentar una salida ordenada, siendo que el marco del Derecho Concursal cada vez intenta ser más abarcativo, llegando incluso a etapas en las cuales las crisis aún sin ser inminentes resultan latentes o de previsible acontecimiento en el futuro.
Para el mundo, Uruguay resulta un ejemplo. Aquél considera como una novedad la posibilidad de celebrar acuerdos previos y extraconcursales para evitar la quiebra (hoy en día, según la Ley 18.387, “liquidación de la masa activa”), mientras que nuestro país cuenta con tal posibilidad desde el año 1926 con la Ley 8.045 del “Concordato Privado”, figura creada en este entonces, y hoy mantenida y reconvertida en el Acuerdo Privado de Reorganización por la Ley 18.387 a instancias de nuestra Institución.
Se discutió además sobre los siempre recurrentes temas de la viabilidad empresarial como condición sine qua non para una salida seria y con posibilidad de ser cumplida, las posibilidades en materia de reestructuración empresarial, el tratamiento de los acreedores laborales, la responsabilidad de los soportes físicos de las sociedades y las crisis de los Estados, entre otros tantos temas.
El Congreso contó además con la particular visión de varios jueces Mercantiles que fueron invitados a brindar sus experiencias, en una escala de presentaciones concursales muy superior al nivel patrio.
En 2019, el Congreso nos reunirá nuevamente en los primeros días de octubre en la ciudad de Viña del Mar, Chile.-